viernes, 20 de febrero de 2009

EL GATO Y EL CASINO (entrega uno)

Angela di Stefano se desgañitaba en vano llamando a su gato, el hermoso Filú, que había desaparecido desde la mañana en las callejuelas de la vieja Niza. Eran las tres de la tarde y, aunque fuera septiembre, todavía hacía un calor espantoso. No solía Filú olvidar su siesta ni su comida, cualquiera que fuese el encanto de las gatas vecinas, y Angela, que lo quería mucho, sentía cada vez mayor inquietud. Su marido, Giussepe, había ido a jugar a la petanca, como todos los sábados por la tarde, y sus vecinas dormían la siesta, hechadas en sus camas de metal tras la oriflama multicolor de las camisas y calcetines tendidos en las ventanas. Angela no se atrevía a gritar demasiado fuerte por temor a perturbarles la siesta e iba susurrando "Filú Filú" por todos los zaguanes, sosteniendo el chal sobre su cabeza a causa del sol.

A sus treinta y dos añosa, Angela di Stefano era una mujer de muy buen ver, muy latina y metida en carnes, pero a la que su ascendencia corsa había dado unos rasgos firmes y a veces austeros, que hubieran desanimado a los eventuales rivales de Giussepe. Por otra parte, éste lo sabía y bromeaba acerca de la virtud de su mujer de una manera que no le hacía gracía a Angela.

No encontraba a Filú y, sin embargo, debía ir al banco antes de las cuatro de la tarde a depositar quinientos francos de costumbre, ya que habían decidido comprar la casa a crédito, mes a mes. Guissepe le había dado su paga la víspera, como un buen esposo, y ella quería deshacerse lo más pronto posible de ese billete tan trabajosamente obtenido. De repente creyó ver un relámpago detrás de un muro, un relámpago gris, y exclamó: <<¡Filú!>> antes de empujar la puerta del jardincillo que rodeaba la casa de la bella Helena. La bella Helena era su vecina desde hacía diez años, y se había murmurado mucho acerca de ella desde su viudez, aunque sin prueba alguna. Siempre de puntillas, Angela dió tres pasos y vio a Filú, desde el alféizar de la ventana con aire burlón, y le llamó en voz baja una o dos veces antes de decidirse a agarrarlo. Filú le hecho una mirada de reojo con sus ojos verdes y saltó dentro de la casa. Instintivamente Angela empujó un postigo para atraparlo, y fué como así como vio a su apuesto Guiussepe dormido en los brazos de Helena. Retrocedió, el corazón palpitante, aterrorizada ante la idea de que él pudiera haberla visto.

3 comentarios:

  1. hey que onda con el gato y la chica que vive en la vieja niza esta chido te felizito es bueno que la gente de este pais al menos un iga interesada por escribir bien bien bien no l lei solo te queria contestar que que mal pedo que no tengo amnesia solo que si no mal recuerdo tu me dejste con la duda si si te veria este sabad y pue s en fin te portaste realmente grocero y no me aclaraste que si si te veria en el metro y pues para que me dejaras plantada de nuevo mejor no boy¨o bien eso pense pero claro claro que me caes super y me siento comoda con tigo y pues ya sera el destino o la vid apar n entrar en devates estupidos commo siempre quien lo decida en fin cuidate que tengas suerte y espero un a llamada o algo de tu parte pues concidero que esta vez no soy yo quien fallo y en fin hasta pronto
    se despide la petulante chica guapa.

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  2. pero si te quiero y si me caes super bye besos

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  3. Oh oh!!!! esto es vergonzante cualquiera diría que me autoescribí este comentario tuyo sólo para blofear y presumir, francamente no tengo enfado en no publicar lo que las personas me hacen en lugares públicos y los que me conocen de tiempo lo saben (poco a poco espero esas mismas personas lleguen a este sitio) por lo de la cuestión de la cita bueno nena considero yo que es una confusion nuevamente te reitero los que me conocen saben bien que el messenger se me hace una ventanita de mala educación te voy a poner un ejemplo y espero me lo puedas contestar, ¿si yo saliera contigo y cuando nos reunamos después de saludarte yo recibiera una llamada telefónica, ¿te sentirías cómoda y bien si yo me pusiese a conversar con la otra persona sin ponerte toda la atención a tí?, cuando una persona esta en mesenger me diras que es diferente porque uno no esta presente físicamente, entonces te vuelvo a cuestionar ¿que no es lo mismo? ¿que las personas no merecen el mismo nivel de importancía ya sea en persona que virtualmente?, dirán que soy ñoño o chapado a la antigua pero para mí cuando estoy conversando con una persona en messenger es como tenerla frente a mí y toda mi atención es suya y no tengo otras ventanas abiertas y conversando con otras personas, si se lee demasiado petulante pero te repito a tí no te agradaría que estando contigo me pusiese a conversar con otra persona vía telefonica al mismo tiempo que tu... dejas de lado los detalles y las apreciaciones se ven torcidas y luego uno considera que no hace nada mal cuando la realidad es otra, eso checalo tú y lo dejo a tu criterio, por otro lado yo no te insulto usando palabras altisonantes se me hace demasiado vulgar y yo a tí no te considero vulgar, si es cierto me pareces en extremo atractiva pero no por ello tengo que tolerar la mala educación aunque hacerlo esto del dominio público pueda ser algo kirtsch pero esta forma tu la preferiste y sólo te regreso lo que ofreces, ¿recuerdas que te lo comente en privado?...bueno como sea mantengo el anonimato de tu nombre para que sigan pensando que me aoutoescribí y quere hacerme parecer interesante.

    Por otra parte dijiste "ME DA IGUAL" ok, a mi no me da igual ya que razono y leo lo que dices con el lenguaje corporal o lo que dices entre líneas, si te DIESE IGUAL en un principio no te enfadarías y para seguir no me hubieses contestado bajo ninguna circunstancia mucho menos de una manera pública en la cual cualquiera puede juzgarme (¿perverso? a lo mejor) así pues mi perspectiva hacia tu persona ya no es la misma a cuando te conocí... como sea cuando leas esto es porque te mande mail.
    Saludos

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